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Un viaje imprescindible para los amantes de la gastronomía es hacer una escapada hasta Guijuelo. Se encuentra a tan sólo 50 km de la capital salmantina y al sureste de la provincia. Su jamón ibérico de bellota fue el primero en recibir la Denominación de Origen Protegida. La mayoría de los guijuelenses viven de su producción tradicional, aprovechando el idóneo clima, seco y frío a la vez a 1.000 metros de altura sobre el nivel del mar.
El que en Guijuelo se encuentren las chacinas mundialmente conocidas y de excepcional calidad, hace que esta localidad sea conocida como el “paraíso del jamón ibérico”. Su fama mundial se debe a su textura y sabor únicos. La pata ibérica de este lugar se caracteriza por su suavidad y untuosidad. Además, la distingue su caña estilizada, su pezuña negra y sus infiltraciones de grasa para un veteado singular. Gracias a la ubicación de Guijuelo, donde el verano es corto y los vientos son fríos, se consigue una óptima curación natural del jamón. Las patas del cerdo de bellota aquí están más expuestas al secado que las del resto de Denominaciones de Origen; por lo que necesita menos cantidad de sal que otros jamones y su sabor es más dulce. Además, los cerdos se alimentan de bellota local, obteniendo así altos índices de ácido oleico y otras grasas saludables.
La tradición chacinera guijuelense arrancó en el siglo XIX, cuando el jamón se elaboraba de forma artesanal y en el mismo pueblo, desde que se sacrificaba al cerdo hasta que se produccían los embutidos. Éstos se embuchaban previamente con el humo de las chimeneas. Después se procedía al salado de los jamones para venderlos más tarde por los arrieros, que recorrían la geografía española a lomo de sus caballos. Hoy en Guijuelo se encuentran más de doscientas empresas cárnicas, dedicadas todas a la cadena de producción de jamón y chacinas del cerdo ibérico: mataderos frigoríficos, salas de despiece, saladeros, bodegas, secaderos y envasado para la distribución.
Todo ello hace que este municipio sea un destino clave del gastroturismo en torno al jamón ibérico. Por lo que aquí se puede hacer una perfecta escapada de un día desde Salamanca o desde Madrid, por ejemplo. Si este es un plan interesante para ti, puedes reservar aquí para disfrutar de un taller y cata de ibéricos de Bellota en la antigua bodega Alma de Ibérico. Harás una visita a la bodega, recibirás una explicación sobre Guijuelo y la elaboración de sus ibéricos como es el famoso jamón "Víctor Gómez". Pero, además, disfrutarás de una degustación comentada de tapas de ibéricos maridados con vino y pan local de pueblo. Se trata pues de una actividad ideal para disfrutar de exquisitos bocados con los cinco sentidos.
Sin olvidar que en Guijuelo podrás visitar el Museo de la Industria Chacinera, donde conocerás al detalle todo sobre la producción del jamón, las técnicas de elaboración y de la conservación de los diferentes productos derivados del cerdo ibérico.