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20/06/2017
La localidad riojana de Haro, celebrará el próximo 29 de junio -día de San Pedro-, una fiesta curiosa: la Batalla del Vino.
El origen de esta fiesta popular, se puede situar a un posible litigio con la población de Miranda del Ebro, por la propiedad de unos riscos.
La fiesta consiste, en que después de una misa, comienza una pelea pacífica entre los dos bandos. En ella sus participantes se lanzan unos a otros litros de vino sin parar, hasta que finaliza la fiesta al mediodía. Después, la gente vuelve a Haro para congregarse en la plaza de la Paz.
Historia de la Batalla del Vino de Haro:
Tras la muerte de San Felices de Bilibio, a mediados del siglo VI, los habitantes de esta zona empezaron a visitar la cueva de los Riscos de Bilibio. En ella se encontraban enterrados sus restos. El peregrinaje a este lugar de culto, se convirtió en el tiempo en algo tan tradicional, que, en el siglo XV, el Consejo de Haro animó a organizar de forma oficial la romería de los Riscos de Bilibio. A mediados de este siglo, se hacían ya festejos entorno a esta romería los días de San Juan y de San Pedro, como son los típicos almuerzos posteriores a su misa.
En el siglo XVIII, se construyó la primera ermita en los riscos. A partir de este hecho, los jarreros y habitantes de los pueblos cercanos, empezaron a festejar la romería como una de las actividades a realizar en honor de su patrón.
Poco antes de comenzar el siglo XX; se realizan los primeros bautizos de vino, como lo denominaban en aquel entonces los asistentes a los remojones de vino. El culto religioso y la fiesta pagana se unieron para siempre en las celebraciones de Haro. En el Diario de la Rioja del 29 de junio de 1898 se decía lo siguiente: “para cuando este número llegue a las manos de mis queridos lectores, ya habrá pasado a la historia la típica romería de Bilibio; tendremos unas cuantas cántaras de vino menos en las bodegas y algunas de más entre el cuerpo y el traje”.
El vino pues, se usaba como munición, convirtiéndose en la esencia de la fiesta. La gente pues comía y bebía hermanada, cantando y riendo hasta agotarse. Y como el vino no faltaba nunca por esta zona, la tradición de la batalla continuó hasta nuestros días.
El 22 de marzo de 2011, la Batalla del Vino, se declaró Fiesta de Interés Turístico Nacional.
Pero si lo que te gustaría es disfrutar del mejor vino riojano, sin "mojarte" en esta fiesta, puedes hacer este interesante Tour del Vino Las Tres Riojas
