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La capital de Castilla y León cuenta con un gran patrimonio histórico fruto de su pasado como capital del Imperio español, ya que los reyes españoles del siglo XVI vieron en Valladolid un enclave excelente para fines defensivos o de comunicación. En relación con su pasado, en ella se encuentran numerosos castillos de estilo único que los historiadores consideraron como vallisoletano propio.
En toda la provincia existen yacimientos arqueológicos en los que se han hallado restos de los diversos pueblos prerromanos que ocuparon Valladolid; y muchos de sus municipios como Medina del Campo o Peñafiel aún conservan la esencia medieval a través de sus castillos y murallas. En el caso de Medina del Campo, el lugar más destacado del municipio es el castillo de la Mota, un parque de artillería excelentemente conservado y el mejor de Europa durante el reinado de los Reyes Católicos. También, Medina del Campo fue el lugar en el que la reina Isabel la Católica dictó su testamento el 12 de octubre de 1504 y donde moriría un mes después. Allí se encuentra el Palacio Real Testamentario, que conserva intacta la estancia en la que la reina murió.
Peñafiel es otro de los municipios vallisoletanos donde aún se respira la Edad Media. Cuenta, al igual que la localidad de Simancas, con un castillo excelentemente conservado y un museo dedicado al vino.
Medina de Rioseco destaca por sus iglesias y por el llamado Canal de Castilla, una obra hidráulica del siglo XIX. Es posible navegar a través del canal para así contemplar la excelente ruta natural que constituye. En Olmedo destaca la muralla del siglo XI, de la que solo se conserva una parte. En ella podemos aún apreciar el arco de la villa y el de San Miguel, dos de las distintas puertas de entrada a Olmedo que existían durante la Edad Media. Por otro lado, la iglesia de San Andrés y la iglesia de San Miguel son dos joyas arquitectónicas del siglo XIII que, de estilo románico y gótico-mudéjar respectivamente, se pueden visitar en Olmedo.
En la comarca podemos encontrar templos de todos los estilos arquitectónicos, desde el prerrománico al barroco. En la capital podemos admirar la iglesia de San Pablo o la catedral de Valladolid; y distintos templos como la iglesia de Nuestra Señora de la Anunciada en Urueña.
Entre los espacios para visitar en la capital se encuentran, entre otros, la plaza Mayor que, proyectada por Francisco de Salamanca en el siglo XVI, es el lugar de encuentro de los vallisoletanos y una de las muestras más exquisitas de este tipo de arquitectura urbana en España. El Museo Nacional de Escultura se encuentra también en Valladolid y alberga una de las colecciones escultóricas más importantes de Europa.
En la gastronomía vallisoletana destacan los asados de cordero y la sopa castellana, además de dulces como los mantecados de Portillo. También puede disfrutarse en Valladolid de vinos con D.O Ribera del Duero.
Uno de los aspectos que hacen a Valladolid única es su Semana Santa, famosa internacionalmente al igual que la de Zamora o Salamanca.
La pequeña localidad vallisoletana de Tiedra tiene un montón de tesoros por conocer, ya que por ella pasaron diferentes civilizaciones históricas desde los vacceos y los romanos. Su monumento más emblemático es un castillo del siglo XIII que aún conserva su patio, murallas y su torre de seis pisos.
Un castillo que utilizó el Cid como moneda de cambio para tomar Zamora, ofreciéndoselo a Doña Urraca. Descúbrelo reservando tu entrada para vistarlo por dentro y por fuera. Contempla las encantadoras vistas de Tiedra y sus campos de lavanda desde lo más alto de la torre.
Descubre el encantador pueblo Tiedra. Situado en la provincia de Valladolid y habitado por las diferentes culturas, desde los vacceos hasta la actualidad. Visitarás su antigua Ermita de Nuestra Señora de Tiedra Vieja, construida sobre el antiguo yacimiento de Amallóbriga.
Te enamorarás de su arquitectura popular y edificios históricos como el Ayuntamiento, las iglesias o el Pósito. Sin olvidar su emblemático castillo que conserva su torre de siete pisos. Contemplarás preciosas estampas del pueblo rodeado por campos de lavanda y conocerás su premiada gastronomía. Y todo esto con la compañía de un guía local.